Pili me recibió con chaqueta blanca "médica", jeans y botas negras. Es simpática, charla amablemente y sonríe mucho. Los masajes bien, como comenté antes, el lugar bien. Una ducha antes de los masajes para estar prolijo a pedido de la srta (ya estaba bañado de antes, pero uno no va a pasar por renuente al agua). Los masajes se extendieron por unos treinta minutos, y ella me preguntó -con un poco de anticlimax- si quería algo más. Mi respuesta era obvia. Voló la ropita con bastante prolijidad, revelando un cuerpo espléndido y acorde con la juventud. L participación no fue guau en términos de implicación pasional, no lo esperaba, pero estar con una chica tan joven y tan bonita es una experiencia fantástica ya en sí, al menos para mí. No hubo besitos, y el oral fue con, como comenté antes. Aquellos que van en busca de una tromba mejor orienten para otro lado, al menos por un tiempo. Ecuación costo beneficio salada, cuatrocientos por el combo, pero es de un atractivo inusual.