Aldana BG - Microcentro. Una deuda saldada con placer

Lo prometido es deuda, dicen. Y las deudas se pagan. No siempre con gusto, claro. Con Aldana no es el caso. A la encantadora nenu rubia de ojos celestes le había prometido visitarla cuando la conocí en el derpa que comparte con Malena BG. Bueno, el viernes por la tardecita la deuda quedó saldada. Y con qué placer! Arreglé con ella al toque por WA. A las 19 su voz provocativa me responde por el portero eléctrico y abre desde arriba. Piso alto en Esmeralda al xxx. Ascensor y nuevamente timbre. La puerta entreabierta genera un instante de excitación que se eleva notablemente unos metros más adelante. Abrazo y besos desaforados. Lengua y manos a discreción. Qué momento! No había duda. Todo daba para ir a la acción directamente. Yo llegaba bañadito y ella derrochaba un aroma embriagador. Pero como corresponde, hubo una escala técnica. Higiene de rigor en un baño correcto, con todo lo necesario. Después sí. El cuarto más grande fue el escenario donde la deuda se convirtió en el más deseado placer. Ella bajando rápidamente a degustar al amigo que de entrada había reaccionado. Qué deleite sentir el calor de su lenguita. Qué sensación inigualable ver en sus ojos el goce de tenerla toda dentro de su boca. Qué recuerdo imborrable devolver favores y entrelazar nuestros cuerpos, hasta dejar su dulce y rosadita chuchi toda a disposición de mi lengua. Cómo le gusta que jugueteen con su clítoris. Te lo hace saber con gemidos que multiplican las pulsaciones y piden a grito penetrar en sus profundidades. Primero, previa magistral colocación del piloto para la tormenta que se desataría, atravesando esos labios mojadísimos. Al comienzo, ella cabalgando como si fuera la última vez. Después, misionero. Luego en cuatro. Los gemidos no cesaban cuando llegó un pedido imposible de negar. “Quiero que me hagas la colita”, fueron las palabras que abrieron la puerta al éxtasis. Nuevo piloto, gel y una paciente dilatación desembocaron en el principio del fin. Un ritmo suave, primero; velocidad en aumento, después, y excitación al máximo tras varios minutos de lubricada fricción. El límite fue el estallido de los luchadores incansables contra el látex y el grito de Aldana que retumbó en el infinito, y más allá. La deuda estaba saldada. Pero hubo una renovación de promesas, de cumplimiento inmediato. La onda, la simpatía, una muy atractiva figura, con la colita como estrella, y un servicio de primer nivel, con regalito acorde, así lo imponen. Y porque no un trío con Malena?

Link a la publicacion en BairesGirls