Salome - Una hora en una telenovela colombiana

Hola Amigos, despues de bastante tiempo vuelvo a escribir xp, lo deje de hacer ya que habia bastante gente solo dedicada a criticar los relatos de los foreros, pero aparentemente el foro se "limpio" de esa gente.
Esta experiencia es del viernes pasado, todo habia comenzado bien, tempranito habia reservado con Valen para las 17hs, pero solo Dios sabe que es lo que paso que nunca me dijo la direccion ni respondio ningun mensaje mas. La espere en zona hasta las 17,20 y despues recurri a la agenda y consegui a Salome para las 18hs.
Habiendo leido las xp publicadas y como no habia degustado colombiana alguna hasta el momento la decision a tomar fue sencilla. Era abby o ella.

Llego al edifio puntual, el portero te pregunta piso y departamento y arriba. Ascensor, timbre y me recibe Salome, con un hermoso beso y una sonrisa pintada en la boca. Ella es morocha, alta, bonita y super simpatica. Hermoso acento colombiano, de Bogota.
El depto. un monoambiente acogedor, super calefaccionado, se ve que no se acostumbra al clima de bs as, paso al baño para la higiene de rigor y al volver le doy el gift y ya tranqui nos acomodamos en la cama. Pequeña charlita para romper el hielo mezclada con ricos besos, y caricias. Las manos empiezan a hacer sus recorridos, la de ella hacia el amigo, las mias a sus tetas. Tenia puesto el body negro de las fotos de la publicacion y como no sabia como sacarlo tuve que preguntar como se sacaba, ya una vez desnudos comenzo un pete sin muy bueno que termino en un 69 donde pude saborear su almejita colombiana, muy linda y en perfectas condiciones.

Me coloca el forro y volvimos a los besos arrodillados en la cama, y poco a poco nuestros cuerpos se fueron acomodando para penetrarla en esa posicion, y sin salir de dentro de ella fuimos pasndo a misionero, rodillas al pecho, patitas al hombro con un muy buen ritmo y siempre comiendonos a besos. Cambiamos nuevamente de posicion, le empiezo a dar de perrito hasta terminar acostados los dos, muy traspirados y los chiquillos no aguantaron mas y se la pegaron contra el forro.
Nos higienizamos, me ofrecio un vaso de agua y como faltaba poco para cumplir la hora nos quedamos charlando de bueyes perdidos los ultimos minutos. Me quedo pendiente probar esa colita, pero seguramente volvere por ella.
Lo pase muy bien con Salome, es muy bonita, re atenta y super simpatica, me calento mucho su acento. Vale la pena visitarla.

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