Geraldine - Microcentro, reencuentro con la niña del placer.

Buenas noches amigos, y en estos últimos dias de la semana, arreglo para visitar a ´Geraldine´, a quien ya visite en otra oportunidad, experiencia que refleje en este ámbito.
Esta vez combino para su primer turno del día, 12 hs., y hacia allí puntual me dirijo. Portero humano que no molesta, y saluda amablemente. Voy hacia su depto, y toco a su puerta, tras ella me recibe, Cabello mojado recién salida de la ducha, conjunto de ropa interior rojo, tacos y suave perfume, tenia una presentación más que ´convincente´
La sigo a su habitación y conversando cosas pasatistas, me entrega un toallón para la higiene previa de rigor. Y al baño me dirijo donde me ocurrió un percance que brevemente relato y del que todavía me río cuando lo recuerdo pero significo cierto susto para la niña. Ocurrió en la ducha y mientras me bañaba giro, resbalo y caigo de espalda fuera de la ducha dando con mi humanidad contra el piso y envuelto en la cortina de la ducha. Geraldine escuchando el estruendo me pregunto como estaba y yo riéndome, asumo la torpeza de la caída como culpa propia le dije que estaba bien, termine de acomodar el desarreglo causado y por fortuna nada me hice, no tengo sobrepeso y entreno, así que ya con ella y mientras no reíamos de lo sucedido, damos por terminado el ´suceso´, chisteando yo que a la salida de allí me iba a un hospital cercano para que me revisen.
Ya en la cama ambos me dispongo a acariciarla. Tiene una piel muy suave y blanca en si mismo muy placentera, así que acomodada boca arriba, y dispuesta a disfrutar se entrega a la propuesta que le hago.
Voy por su boca que no mezquina, luego sus pechos pequeños y reactivos, pezones también encantadores y su sexo también impecable y sin olores que largamente me dedique a degustar.
Relajada, escucho sus suspiros que tanto me motivan, luego de sus contorsiones, pido devolver favores y también tiene un oral que me gusta mucho, alterna movimientos, y sus manos pequeñas pero fuertes hacen una buena tarea. Calzamos protección y la coloco a ella arriba mio. Como dije en otro momento, me encanta sentir su pequeña humanidad sobre mi. Introduce mi pene en ella y fundidos entre besos y abrazos, largamente la disfruto en esa posición y se destaca su entrega. Luego voy yo arriba y de costado, y lo mismo, excelente predisposición de su parte, palabras dulces presentes en todo el encuentro y mis manos que no dejaban de sentir toda su piel.
Ya cumplida la hora, tiene una alarma que suena cumplida la hora de encuentro y para resaltar también es que cuenta la hora desde que comienza la ´actividad´, no desde que llegas al departamento, como hacen otras que te marcan el tiempo inclusive diez minutos antes que ingresaste al depto. Así que ya con el tiempo ´cumplido´, pido terminar en su boquita y quitando la protección, vuelve al oral, repitiendo la buena técnica mostrada, logrando llegue en buena cantidad que lleva al baño a escupir.
Se higieniza, luego voy yo, mientras me visto conversamos, del ´incidente´ pasado, siempre mostrando su buena onda y educación. Abono lo pactado, nunca lo pidió y me despido con largo beso y promesa de pronto regreso.
En conclusión, esta nueva ´joyita´ que me gusta visitar porque tiene un servicio atento y esmerado, y no luce mañas por lo que prontamente volveré por sus encantos.
Gracias y hasta la próxima.

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