Florencia BG: bonita, simpática….pero esperaba más

Hacía rato que tenía anotada en mi lista de pendientes a la famosa Florencia BG. Las fotos de la publicación sumadas a las experiencias leídas habían hecho que la Srta. en cuestión pasara a estar bajo la órbita de mi radar gatero.

Hace poco leí el relato del colega Malonxxxx, quien además gentilmente me pasó material, y decidí conocerla. Primer punto para aclarar. Gracias al material aportado por el usuario sabía de antemano que no me iba a encontrar con la chica de la publicación. Al natural Florencia es menos estilizada de lo que las imágenes de Baires muestran. Aun así, y a pesar del antifaz que tenía en las fotos recibidas, se perfilaban unos rasgos agradables, una sonrisa compradora y un físico aceptable.

Le escribí. Me contesta con el típico “copy-paste” describiendo servicio y arancel. Coordinamos para esa misma tarde y me dirijo a su departamento de Maipú al xxx. Edificio con portero y seguridad, ambos amables, responden al saludo y no intervienen con preguntas incómodas. Me anuncio por el portero eléctrico y subo.

Toco timbre, ruido de tacos, apertura de puerta y Florencia escondida detrás. Al ingresar la veo. Rubia por elección, con los tacos pasa el 1,70, más grandota que en las fotos de baires, cuerpo armonioso pero contundente, sonrisa simpática. Tenía un vestido corto oscuro que marcaba sus curvas y sus abundantes pechos. Nos saludamos. Departamento grande, varias habitaciones, conté tres, desconozco si hay más. Me dijo que comparte con dos amigas, una es India y no recuerdo a la tercera. Esto hace que el lugar requiera cierta coordinación para que no te cruces con otros colegas, lo cual le resta un poco de intimidad. Florencia es amable, atenta aunque un poco acelerada. Parece que estuviera todo el tiempo contrarreloj. Pasamos a la habitación, me preguntó cuánto me quedaba y me pidió el gift. Paso al baño a higienizarme. Al rato va ella. Acá noté las actitudes de chicas que laburan en privado de salir a cada rato de la habitación y tardar en volver. A lo largo de la hora habrá salido unas tres veces. En la habitación de Florencia además de la cama de dos plazas hay una camilla de masajes junto a la ventana. Para terminar de decorar el cuadro un guardapolvo de masajista colgaba de una percha en la manija del placard.

Empezamos la acción. Intenté arrancar suave con una previa de buenos besos. Me topé con el acelere de Flor que ya quería acostarme en la cama. Los besos, al menos conmigo no fueron intensos. Para mi ese es un punto fundamental. Enseguida me manoseó la pija y cuando notó que estaba dura me la quiso chupar. El oral es bueno. No usa las manos, es profundo, succiona el glande de forma intensa, lame el tronco y también los testículos. Yo, después de una semana sin actividad sexual, ya estaba al palo mal. Me dice que quiere que la coja en cuatro. Me pone forro, mi pija estaba durísima, y la empiezo a penetrar desde atrás. Muchos gemidos, mucho acting, no tiene pausa. La verdad yo la estaba pasando bien, no hacía falta eso, me había dejado excitado. Bombeo un rato largo, traté de aguantar lo más posible para no acabar tan rápido. Mi semana sin sexo se notaba en la dureza extrema de mi pija. Sigo cogiendo en cuatro, me agacho un poco para agarrarla de las tetas y besarla en la nuca. Se da vuelta y nos damos algunos besos en la boca. La cambio a misionero. Sigue gimiendo aparatosamente. La vuelvo a besar. No logro sacarle besos muy profundos. Empieza a pedirme “la lechita”. Ok…Ahí vamos. Le pido acabar en las tetas. Se sienta en la cama y yo parado a lado. Me saco el forro y le largo todo el semen en las tetas y le salpico un poco las piernas. Un guascazo violento. Ella simpática se ríe y va al baño a limpiarse el enchastre.

Vuelve y nos quedamos un rato en la cama charlando. Es simpática, me pareció una mina con buena onda. Me abraza y empieza a darme unos besos. Me sorprendió. Era como si de repente se hubiera vuelto mimosa. No duró mucho. En cuánto se dio cuenta que mi pija estaba reaccionando quiso empezar de nuevo. Me hubiera quedado un ratito más charlando antes de seguir pero de vuelta la noté con ese especie de acelere. Otra vez arranca el oral. Tengo que reconocer sabe hacerlo bien. Al chuparme la pija se pone frente a mí, con el cuerpo hacia los pies de la cama, ubicada de una forma estratégica que se me hace difícil tocarla. Tengo que estirar el brazo en forma muy forzada para agarrarla de los pechos o ponerle la mano en la cabeza para acompañar el ritmo del oral. Ni hablar de tocarle la cola. Sonrío para mis adentros. Evidentemente sabe lo que hace. Otra vez esos vicios de privado pero no puedo dejar de admirarle la inteligencia. Si no tuviera varios años andando el mundo del gateo esas cosas pasarían desapercibidas. De nuevo esos gemidos de mina hiper excitada. Salvo que el hombre invisible le esté dando de atrás mientras ella me chupa la pija realmente no se justifica tanto griterío. Tal vez algunos lo encuentren excitante, yo prefiero algo más auténtico. Ya estábamos cerca de terminar el horario y Flor empezó a insinuarme si quería darle la lechita. Ya no teníamos tiempo para intentar una segunda cogida, así que acepté su sugerencia y me concentré en largar mi descendencia por segunda vez. Le avisé que iba a acabar y en ese momento ella muy sutilmente se adelantó unos centímetros hacia adelante para que mi descarga caiga en sus pechos y no en su boca. Nada que decir, la flaca sabe a qué juega. Me saco el sombrero.

Ambos pasamos al baño para la higiene de rigor, charla amena mientras me cambiaba. Me acompañó hasta la puerta (al salir me crucé con una de sus compañeras que “casualmente” pasaba por ahí), beso de despedida y de vuelta al asfalto porteño.

Conclusiones: Desde ya que toda opinión es subjetiva y soy consciente que escribo desde mi subjetividad pero por el arancel que maneja Florencia esperaba encontrar un trato más personalizado, algún agregado que marque la diferencia. Si bien me pareció una flaca simpática y con cierto atractivo físico, no encontré un punto que merezca ser destacado en la experiencia o que la haga diferente de otras que he vivido. Muchas veces uno tiene una conexión, una cuestión de piel o un feeling que en este caso no lo tuve. El trato de ella fue correcto, no tengo nada que decir pero faltó ese agregado intangible que es difícil de describir y que inclina la balanza para que tengas ganas de volver.

Un gran saludo a todos

TABLITA DE LA EXPERIENCIA

Regalito: xxxx
Barrio: Microcentro
Bucal: SIN
Es Independiente: SI
Besos: Piquitos
Calificacion Gral: 7

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Cara: 8
Lolas: 9
Cola: 8
Cuerpo: 8
Onda: 8
Lugar: 7
Porcentaje photoshop: 20 %
Relojea?: Si
Servicio: 7
Reinicidencia: No

FOTOS DE LA PUBLICACION

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