Carlos, como siempre, un placer leer tus relatos, como siempre, me transportan a una película, con miles de matices, en fin ... Para qué agregar algo más? Sublime, como siempre!
Con respecto a tus cavilaciones, no existe nada más complejo que el cerebro humano, así es que no te sorprendas por los caminos que él te haga transitar.
Y si encima, la causante es la bella y dulce Tami, bueno, entonces, todas las piezas encajan!
Felicitaciones por la xp con la dulce (digo esto sin conocerla, pero parece ser la palabra para describirla) Tami! Gracias, como siempre, por transportarnos con tu relato (al menos conmigo, lográs eso)
Saludos gateros!