¿El mensaje rompe las reglas?
Reporta a total.esunratito
[XP] [XP] EL HOMBRE IMPAR
20-Nov-2008, 19:01
Una XP diferente con sexo real explícito.
Bush presentó al futuro presidente sus colaboradores de seguridad nacional.
-“El coronel Richardson, es mi hombre impar…” –señaló al militar que permanecía en el medio del Salón Oval, en posición de firme.
Obama se incorporó y le extendió la mano. El rostro del coronel era una esfinge sin sentimientos.
-“Me han hablado de usted, coronel. Es probable que lo libere de la pesada carga que llevó durante 8 años…” –le dijo.
-“Gracias, senador Obama” –fue la única respuesta.
-“Ya tiene pensado quién será su hombre impar?” –le preguntó el presidente.
-“El Comando Estratégico me ha dado una terna. Quisiera que el coronel pueda rehacer su vida…” –respondió el moreno.
El hombre impar es el ayudante – enlace del presidente. Siempre es un oficial. Siempre es un huérfano que fue seleccionado para cursar la carrera militar. Siempre es un soldado sin padres ni familia. Un hombre solitariamente solo. Lo denominan: hombre impar. Su misión es –tal vez- la más descabellada, en un mundo descabellado. Es el que porta la valija con conexión satelital que lleva, en su interior, el terrible botón rojo de ataque nuclear. Del inicio de un holocausto sin final cierto.
Su misión es reemplazar la decisión de defender Estados Unidos o atacar al enemigo que lo ataca. Solo lo hace si el presidente y vicepresidente se lo ordenan o son anulados. Solo en caso de peligro es el responsable de accionar el mecanismo que ponga en funcionamiento el escudo estratégico de contra misiles y el ataque nuclear al blanco que escoja el Comando Táctico. No tiene que titubear un segundo, ni ser “interferido” por emociones o sentimientos, como pensar en su familia o hijos. Ni siquiera le es permitido participar de clubes, logias o centros de oficiales. No puede hacer amigos. El hombre impar está solo y su equilibrio emocional garantiza la paz o la destrucción de Estados Unidos. De su cuello cuelga la llave y en sus huellas digitales: la clave.
Miles de kilómetros al sur, Alondra me recibe con una sonrisa. La tonada caribeña es muy marcada. Hace pocos días que arribó a nuestro país y eso asombra su mirada ante cada “novedad”. Como todas las del Caribe, lava la carne varias veces antes de ponerla a cocer. Cuando la cocina la sazona en exceso “para darle sabor”. Come con cerveza. El vino no le agrada. Mezcla palta con lechuga y a todo le pone unos gramos de pimienta de Cayena que enrojece el paladar y alienta las hemorroides, de quien no se halle acostumbrado.
Sin embargo, Alondra, tiene virtudes que la hacen merecedora de elogios. A un cuerpo de “mulatona” le suma unos ojos impactantes y una actitud suavemente guerrera. Sus manos son tibias y sus pechos, dos pomelos deseosos de libar.
Otra parte impactante de su cuerpo es su cola. ¡IM PRE SIO NAN TE! Un monumento a la redondez. Se inicia en la cintura cimbreante y finaliza en dos piernas bien torneadas.
No es alta. Es maleable. Se adapta al gusto de quien contrata sus servicios. La piel caliente y las caricias prestas, hacen de su actitud un verdadero solaz del deseo.
Por eso, cuando besé esa boca carnosa y las lenguas de ambos intercambiaron movimientos inquietos, presentí una hora de verdadero goce subliminal. Desnudos comenzó una danza tribal a mi alrededor, sin perder el contacto de piel con piel. El perfume de su cuerpo tiene la levedad de la petunia y sus manos inquietas por recorrer mi cuerpo, transmiten una electricidad que preanuncia la exquisitez del éxtasis.
Fue un bucal cargado de miradas cómplices. Disfruta mirar como disfruta su hombre ocasional. Suave y prolongado. Lento y profundo. Lengua y succión. Tenaz recorrido de tronco y glande con visita persistente a la bolsa genital sin dejar de acariciar el enhiesto extremo.
Cerré los ojos y me dejé transportar por esta diosa de ébano a paraísos exóticos y de esa forma exudé mis jugos con espasmos de cantos alados, dientes tensos y un sonido gutural de placer.
El relax me arrastró a un agujero negro que hizo perdiera la noción del tiempo. Como pude arrastré mi humanidad hasta el baño, donde le di tregua a mi piel con el frescor de agua cristalina. Una vez seco, regresé para caer como lastre sobre el mullido colchón.
Habrán pasado cinco minutos. Tal vez, seis. Cuando los labios ansiosos de Alondra, volvieron al ataque. Y esta vez fue un fuego contra mí. Un torbellino de deseos irrefrenables. Un huracán demandando sexo con la desesperación de un esclavo que araña muros y aceros para lograr la libertad.
Fue algo casi humano. Porque sus ansias de ser penetrada la transformaron en una pantera en celo. Y allí reamó su ópera prima. No necesitó otra cosa que su piel y su boca para despertar un miembro flácido y llevarlo hasta el punto que dolía su rigidez.
Me arrojé sobre ella y la penetré sin hesitación alguna. Arrojó su cabeza hacia atrás y me apretó contra sus pechos.
Y allí comenzó un movimiento ondulante donde todo su vientre estallaba en espasmódicos movimientos que facilitaban la penetración.
Y me sentí feliz, como si retornara al útero materno a través de esos movimientos pélvicos imposibles de narrar.
Ella llegó al orgasmo primero. El segundo, siempre me cuesta más. Pero la diferencia horaria entre el de ella y el mío no arrojaba más de tres o cuatro minutos. Cuando lo sentí llegar, le avisé. Levantó las piernas y me las cruzó por detrás, en la cintura. Y apretó con fuerzas, porque mi piel ya vibraba de placer, cuando ella gritó un nuevo orgasmo.
Fue casi a dúo. Distantes por pequeños segundos suspendidos en el tiempo del tiempo.
Cuando salí duchado, mi rostro se hallaba sereno y relajado. Una vez vestido me despidió con un beso de novia, suave, profundo, prolongado, que levantó comentarios y cargadas de Andrea.
Al chocar con la realidad de la calle me detuve a mirar los seres que circulaban. Grises, alocados, casi corriendo de uno hacia otro lado. Detecté soledades similares a la mía. Soledades aún de los que se hallan en familia. ¿Qué es la vida del gatero sino un trozo de soledad que se refugia en las mieles femeninas, con fantasías de ser novias momentáneas, sutiles y temporales?
Pensé en los miles de relatos que se volcaron en el Foro sobre instantes felices en medio de eternas soledades compartidas que, como tan bien lo dice Fito Páez, nos transforman en doblemente solos. ¿Somos todos hombres impares conduciéndonos en un mar de esposas, hermanas, hijos, novias, compañeros de trabajo? ¿Y los padres? ¿Y los amigos? Todo el staff acompañante con su verborrea a cuestas, que nos sumerge en un mar cotidiano de quehaceres inconclusos.
Entonces. ¿Por qué reclamamos esos besos furtivos? ¿Por qué necesitamos otra piel que reemplace la piel del hogar? ¿Somos, inconscientemente, hombres impares deambulando por el tiempo, en búsqueda del fin del final?
Crucé la calle Uruguay e ingresé al garaje.-
PD: Alondra es una chica del staff de Andrea que probablemente parta a fin de mes. No hay foto aún.
Tablita: Cara 8 (tiene unos ojos que te iluminan el alma)
Cuerpo: 9
Cola:
[nro no permitido - reglas] de lejos lo mejor (pero no entrega)
Actitud: 10
Conversación: Tiene poco tiempo en Argentina y no conoce casi nada. Hay que hacerle preguntas y se larga a charlar.
Vayan, antes que se ausente. xxx% recomendable.
Total.esunratito